Es ya muy tarde, y voy a dejar ya las noticias, pero me recorre una angustia profunda. ¿Lograrán aguantar más días los habitantes del norte de la franja, sin agua ni gas ni electricidad, cortados de los suministros del sur? ¿aguantarán los médicos sin medios? ¿cúanto soportarán los nervios? La resistencia de Gaza cada hora es un reto a la existencia del hombre en las condiciones más duras. Me da vergüenza dudar de sus fuerzas. Gaza es más fuerte.