El año pasado, 2008, las fuerzas de ocupación y terrorismo en Afganistán, de la OTAN, o de la coalición, o como se las quiera llamar, de los EEUU y de la UE y de Canadá, mataron a 1100 civiles afganos, culpables de ser afganos y seres inferiores para el imperio, víctimas colaterales que no merecen el interés de los ciudadanos de las democracias atlantistas y progresistas. Petraeus y Karzai proponen que en adelante los asesinen más sus propios soldados afganos. También mataron porque les gusta la heroína que les vende el hermano de Karzai, porque los atlantistas somos hedonistas. Mientras tanto, la resistencia afgana de los neotalibanes está complicando seriamente el abastecimiento de las tropas de ocupación y terrorismo.
Abenyusuf 