Bismillah al rahmán y rahim
Con la presidencia de Bush, el ideólogo Rumsfeld salvaba aún a media Europa, por inversión de términos, puesto que elogiaba a la Nueva Europa que se sumaba a la operación de banditismo y terrorismo internacional programada contra Irak. Seis años después, la conclusión es que la reconciliación entre la Vieja y la Nueva Europa ha sido un éxito. No hay ninguna fractura. El consenso europeo es absoluto. Somos un continente antipático, racista, xenófobo, que apoya con subvenciones gigantescas a nuestra agricultura (la de las grandes corporaciones agroindustriales, no la de los campesinos) y castiga a la de los países de África, que cambia leyes para proteger a los terroristas estadounidenses e israelíes, que vive con una colonización mental semejante a la que sufren los países ex-colonizados, pero nuestra colonización mental es la del colono. El viejo racista cruel y violador que abusa de los seres humanos que considera inferiores. Europa en su conjunto es la culpable del peor crimen jamás cometido, Auschwitz, y no solo no lucha eficazmente contra el antisemitismo y el racismo, sino que tolera y alimenta y defiende con uñas y dientes el racismo sionista de las tres religiones y el sionismo ateo. Cualquier racismo es bueno mientras sea antisemita o sionista, ese es el mensaje de Europa. El racismo contra los negros está mal visto, pero solo porque está actualizado en forma de explotación ultraliberal, absolutamente intocable en un estatus pseudoeconómico más allá del bien y del mal definible. África es la víctima de las estructuras económicas controladas desde EEUU, Japón y Europa, y es víctima de los lucrativos negocios de armas producidas en los países atlantistas, Rusia y China. Los europeos no reconocen la gravedad de las consecuencias de sus políticas y sus negocios de armas y humanitarismos asociados, como los colonos no reconocían la maldad intrínseca de la colonización, y bendecían sin parar los beneficios de la civilización (de la que sólo ellos se beneficiaban o se benefician por discriminación oficial, como sucede en Israel y como sucede con la hiprocesía de los sinpapeles). Antes Europa compraba a sus lacayos occidentalizados, y hoy usa (sin tan siquiera ya tener que pagar) los servicios de las dictaduras, especialmente las de los países africanos y asiáticos, especialmente las de los países árabes, especialmente las de los países árabes «moderados», especialmente de Egipto y todo el norte de África: el rey tirano Muhammed VI, Buteflika, Ben Ali, Gaddafi y Mubarak, para la misma operación de saqueo y explotación de los pobres moros por los ricos blancos (ya no hace falta que sean cristianos, pueden declararse ateos y socialistas). Están ahí porque son los amigos de Europa, los amigos de los enemigos de sus pueblos que dicen gobernar, amar y representar. Seguimos en las mismas luchas desde al menos tres siglos. Feminismo, antirracismo, anticolonialismo, antiimperialismo, antimilitarismo, antifascismo, anticapitalismo, son esos los combates y la fuerza que los anima es mayor que nunca. Gaza sella esa urgencia. Allahu akbar.