En general, se puede decir que existen dos caminos para lograr el éxito en los negocios o en cualquier otro proyecto que uno emprenda en la vida: o contar con un conocimiento extraordinariamente profundo y preciso en algún ámbito determinado, es decir, el camino del experto, por así decirlo. . ., o contar con esa seguridad inocente y onírica del extranjero que carece de contactos y que, sin ningún conocimiento previo, se acerca hoy a cien vagones de conservas de leche y mañana a la producción y distribución de libretos de opereta. Estos dos puntos de partida diametralmente opuestos son los más seguros. Cualquier solución intermedia será más débil.
Los demonios, de Heimito von Doderer. Traducción de Roberto Bravo de la Varga. Acantilado. Barcelona, 2009, p. 516.