Bismilah al rahmán y rahim
Fue hace un año, el ataque de Israel contra Gaza. Me dejó exhausto. Apenas pude reanimarme con las manifestaciones antifascistas en Irán. Después me dediqué a repensarme. Después a leer las noticias de otra forma. Y ya me he cansado de todo, sobre todo de mí mismo como caricatura de islamoizquerdista. Por supuesto, sigo siendo un islamoizquierdista, pero quiero ser más que eso. Por eso he suprimido mis feeds de Le Monde, de Libération, de la prensa palestina, del movimiento BDS, por que era una gran tontería por mi parte. No hacía más que leer los titulares. Y así no se va más que hacia la propia destrucción de la sensibilidad. No aguanto ya a Chávez, pero sigo estando del lado de los camaradas de izquierda de América Latina. No aguanto ya a los intelectuales franceses, pero sigo amando la literatura francesa con toda mi alma. He perdido el ritmo del blog y será difícil recuperarlo. Puedo intentarlo. Pero sin teoría anticapitalista. Estoy harto de los abertzales que se cuelan en mi pantalla. No aguanto a Sarkozy ni en titular. Fuera, fuera, fuera, Limpieza. Picasso y tauromaquia, que eso sí es arte de izquierdas.